Las principales diferencias con el prototipo son los paragolpes y la adición de ventanas en los cuartos traseros detrás de las puertas.
Durante los dos primeros años de producción, tanto los modelos de tracción delantera (FWD) como los Quattro equipaban un motor gasolina de 1,8 L con cuatro cilindros, turbocompresor y 20 válvulas, que desarrollaba los 180 CV (132 kW).
En 1999, se lanzó un modelo Quattro más potente, el cual fue equipado con un motor de 225 CV (165 kW) que comparte el mismo diseño básico pero con un turbocompresor más grande, un intercooler adicional en el lado del conductor, bielas forjadas, escape doble y algunos otros ajustes internos diseñados para soportar el aumento de empuje del turbo de 10 psi hasta 15 psi.
Todos los modelos TT fueron llamados a revisión a finales de 1999 y principios de 2000, debido a inquietudes acerca del manejo y estabilidad del coche, el cual fue considerado inestable en giros a alta velocidad, como resultado del sobreviraje por aceleración.
En esa campaña se efectuaron varias modificaciones, que fueron incorporadas en todos los futuros modelos: se colocaron alerones traseros (para reducir el alzamiento), se colocaron contrapesos, se modificó la configuración de la suspensión (para aumentar el subviraje) y se añadieron otras medidas de seguridad como el ESP.
La oferta de los motores originales de cuatro cilindros fue complementada con un motor V6 3.2L de 250 CV (184 kW) al principio de 2003, el cual viene con el sistema de tracción total Quattro.
En octubre de 2004 se estrenó una nueva transmisión llamada DSG (de doble embrague), la cual mejora la aceleración mediante una drástica reducción en el tiempo para el cambio de marcha.
Audi sacó 100 ejemplares de Edicion Limitada (El Audi TT LeMans), pero tambien desarrolló un TT con algunas notables mejoras, incluyendo un modelo "Quattro Sport" aligerado y con un aumento de potencia, con 240 CV (176 kW) y una velocidad máxima de 250 km/h (155 mph). Pero ya veremos estas dos versiones mas adelante.
Jesus Llagas (jllagas)